Adrian Mac Liman, en
su blog Ventana al Mundo, nuevamente adjunta un artículo de
opinión, muy interesante, dada la delicada situación. Más cuando ésta es la de
un experto analítico de la política internacional y
quehaceres de la misma, como lo es Mac
Liman. Por considerar que puede ser
del interés de nuestros lectores, lo adjuntamos en elblogdefcosvi.
Adrian Mac Liman, escritor, periodista.
Colaborador en varias revistas, y ha sido corresponsal en distintos medios de
comunicación. Agudo observador y analítico político. Autor de varios
libros sobre Oriente Medio y el Islam radical.
Adrian Mac Liman
Rumorología
nuclear
Por: Adrian Mac Liman
Ventana al Mundo
21/08/2016
Tras
el fallido golpe de Estado de Turquía
del pasado mes de julio, Norteamérica trasladó a Rumanía los artefactos nucleares
almacenados en la base aérea de Incirlik.
La noticia, facilitada el pasado fin de semana por la publicación electrónica EurActiv, provocó reacciones en cadena
en Bucarest. ¿Escándalo político sin
precedentes? ¿Episodio de una ciberguerra llevada a cabo por una potencia
regional? ¿Simple tormenta en un vaso de agua? En realidad, poco importa. Lo
cierto es que políticos, militares, periodistas y analistas de toda índole
aprovecharon la oportunidad para enzarzarse en un interminable debate sobre la
soberanía nacional y la seguridad del país carpático, convertido, tras la
visita del Presidente Erdogan a Rusia, en uno de los baluartes atlantistas
en la región.
La
verdad sea dicha, la idea de almacenar ojivas nucleares en suelo rumano no
parece ser del agrado de los habitantes de este país. Con razón: durante su
pertenencia al Pacto de Varsovia, agrupación
estratégica de los países del Este liderada
por Moscú, Rumanía se negó a albergar las instalaciones del sistema balístico soviético. Bucarest había firmado y ratificado el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares (TNP), que prohíbe el estacionamiento de
armas atómicas en el suelo de las Partes Contratantes. Más; ¿se puede hablar de
una violación flagrante del TNP en
el caso de los aliados de la OTAN?
Conviene
volver a la fuente; a la información publicada por EurActiv, portal especializado en noticias y comentarios sobre la UE y la Alianza Atlántica. Sus redactores suelen utilizar fuentes
fidedignas, tanto comunitarias como estadounidenses. En la mayoría de los
casos, la veracidad de la información está avalada por la acción institucional
de Bruselas o por las medidas
adoptadas por los Gobiernos de la Unión.
En
el caso de los artefactos nucleares de Incirlik,
los autores del informe aseguran haber consultado dos fuentes distintas que
corroboran la versión: Norteamérica
está trasladando parte del arsenal atómico de la base turca, concretamente,
bombas de hidrógeno B61, a las
recién inauguradas instalaciones de Deveselu,
que albergan uno de los eslabones clave del escudo antimisiles.
Para
los estrategas rumanos, el informe forma parte de una enorme manipulación,
basada en un gigantesco embuste. Deveselu
no tiene capacidad de almacenamiento suficiente. Habitualmente, las armas
nucleares necesitan silos especiales, con muros de un grosor determinado e
instalaciones de aire acondicionado. Pero la base rumana no cuenta con
instalaciones idóneas.
Otra
opción sería el aeropuerto militar de Constanza
que, hoy por hoy, carece de estructuras adecuadas. Huelga decir que, en ambos
casos, los habitantes no han notado movimientos inhabituales.
Tanto
el Ministro de Defensa rumano como
el portavoz de la Cancillería desmienten rotundamente las informaciones de EurActiv. Meras especulaciones,
afirman, campaña de desestabilización a escala internacional, destinada a
fomentar el deterioro de la imagen del país. Sin embargo, los rumanos recuerdan
que en el caso de las cárceles secretas de la CIA, el Gobierno de Bucarest
fue incapaz de ofrecer una versión creíble y coherente. La opinión pública
sigue esperando una explicación.
Norteamérica es consciente de haber perdido (el
control de) Turquía; el país se ha
cambiado de bando, está en el campo de Rusia, afirma el periodista Georgui Gotev, uno de los autores del informe, quien asegura que el
“affaire” de las armas nucleares podría considerarse irrelevante comparado con
los espectaculares cambios geoestratégicos que se están avecinando en el
Sudeste europeo y el Cáucaso.
De
todos modos, conviene recordar el secretismo que rodea las actividades del
ejército y los servicios de información estadounidenses en la región. Un
ejemplo: el supuestamente inseguro personal civil o militar de la base aérea de
la OTAN de Incirlik jamás tuvo acceso a
las instalaciones ultrasecretas (¡nucleares!), custodiadas constantemente por
vigilantes transatlánticos.
Las
respuestas a la incógnita de Develesu
habrá que buscarlas, pues, en… Washington.